Todos tenemos en el fondo de algún cajón (y algunos hasta a la vista) alguna pieza de ropa interior de lo más antierótica. Esos calzoncillos que te compró tu abuela o esas bragas a las que tienes mucho cariño pero que ya empiezan a transparentar cuando originalmente eran opacas. Pues bien, ha llegado la hora de deshacerse de ellos.

Entre ayer y hoy estará recogiendo nuestra ropa interior usada en el Campus de la universidad Pompeu Fabra, en la Ciutadella de Barcelona. Además, para los 1000 primeros habrá premio, les regalará ropa interior sexy de su marca a cambió de sus calzoncillos o bragas viejas. ¿que os parece?

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